Titiritera y profesora argentina. Tras haber realizado estudios de artes plásticas y estancias en Europa y en América, Mané Bernardo descubrió el teatro de títeres en la década de 1930 y contribuyó al desarrollo del teatro independiente con La Cortina, compañía fundada en 1937. En 1944, fundó y dirigió el Teatro Nacional de Títeres, del Instituto Nacional de Estudios de Teatro, en Buenos Aires, que permaneció en funcionamiento dos años. En 1947, con su amiga y alumna y al mando de su propia compañía de títeres, (que tenía sus nombres), Títeres Mané Bernardo-Sarah Bianchi (nacida en Buenos Aires en 1922), se lanzaron a una aventura que marcó de forma duradera el teatro de títeres argentino. Preocupadas por promover el teatro de títeres como un arte en sí mismo, estas dos titiriteras incluían en su repertorio, presentado en teatros y en televisión, obras clásicas y vanguardistas, dirigidas tanto a niños como a adultos. También presentaron su trabajo en Estados Unidos (1963) y en América Latina (1973).

La participación de Mané Bernardo en sus producciones es como sigue: El Mundo de la flor verde, autora; Removiendo cachivaches, autora, diseño de vestuario, escenógrafa, directora de música, directora; Si te chistan, no mires, autora; Toribio camina para atrás, autora, directora; Toribio abre las puertas, autora, directora; Toribio busca su media, autora, intérprete, directora; Dicen y hacen las manos, autora y directora.

Mané Bernardo realizó un importante trabajo de investigación, formó a numerosos titiriteros argentinos y recibió muchos premios y homenajes en Argentina, en Perú y en Italia. Tras su muerte, Sarah Bianchi continuó con su labor, presidió la fundación creada en 1983 con el nombre de las dos y el museo argentino del títere, que fundaron juntas en 1985. Sarah Bianchi también recibió una quincena de galardones nacionales e internacionales.
(Véase Argentina.)