Compañía francesa creada por Colette (nacida en Fontainebleau en 1930) y Claude Monestier (París 1929-Crosne 2001). Los Monestier, artistas plásticos de formación, se conocieron en 1957 en la clase de títeres de Marcel Temporal. Crearon las “Marionnettes des Tournemains” en la que privilegiaron la técnica del títere de varillas con, por ejemplo, Lancelot du lac, (Lancelot del lago), en 1962 y L’Histoire du soldat, (La Historia del soldado), en 1967. A partir de 1970, cambiaron el nombre de su compañía de teatro a Théâtre sur le fil, y eligieron manipular materiales simples a primera vista: cartulina, tela y cartón ondulado. Esta elección convirtió la compañía en el símbolo de una línea totalmente original e innovadora.

En el teatro “sur le fil”, los Monestier practicaban una manipulación equiplana con prensión directa de los títeres. Les daban vida delante de ellos, a lo largo de dos hilos tendidos al horizontal en la escena. Se vestían de negro y actuaban delante de un fondo de escena igualmente negro. Cortaban una hoja de cartulina blanca de la que nacía un hombrecito y su doble que era simplemente su corte vacío en la hoja. Una multitud de personajes y objetos de papel recortado o de tela se iban colgando sobre los hilos a medida que avanzaba la obra. Sus creaciones más destacadas son: Oiseau vole (“Pájaro vuela”) en 1970, Garganthéâtre en 1975, Château de carton (“Castillo de cartón”) en 1983 y 1984, Une île pour Ulysse (“Una isla para Ulises”) en 1985. Desde 1981, se instalaron en Crosne, en Essone, donde formaron una compañía permanente de cinco miembros.

Aunque no haya ninguna prueba tangible, podemos pensar que fueron los herederos más directos de las obras de Yves Joly por su similitud en los materiales utilizados. Sin embargo, dejaron sus huellas en una generación de titiriteros tal y como lo señala la historiadora polaca Lucyna Kozien: “Los Monestier lograron unir de forma armoniosa dos elementos que a menudo están opuestos: la fascinación a través de la forma y la ambición intelectual. Cada nueva obra de los Monestier es una invitación a la participación al acto creativo, a la complicidad de los titiriteros y del público con el fin de descubrir una nueva forma de ver el mundo”. Habían imaginado un hilo tendido, frontera entre lo maravilloso y la realidad, para reemplazar el teatrillo de títeres. El hilo está roto.
(Véase Francia.)

Bibliografía

  • Monestier, Les, de Stéphane Nota, video producido por el Instituto Internacional de la Marioneta, Charleville-Mézières, 2000.