Es una compañía de títeres de Nicaragua fundada en 1990 en Managua por Roberto Barberena. Este titiritero, llamado “Pipo”, descubrió los títeres cuando era niño. Su padre le regaló dos títeres mejicanos que presentó durante la gran campaña nacional de alfabetización de 1980. Empezó entonces a fabricar títeres a partir de materiales de recuperación, periódicos o cartón. En 1983, creó el grupo José Benito Escóbar, del nombre de su escuela y con la asociación de niños sandinistas, presentó Los chigüines en el III festival de Teatro para niños. El objetivo de Pipo y de su compañía es de contribuir a la formación de los niños transmitiéndoles un mensaje de paz y el respeto de la vida. Recorrieron el país con obras como El retablillo de Don Cristóbal o Un Marciano llega a tierra.