La más antigua y más famosa de las compañías itinerantes de la Suiza alemana, fundada en 1955 por Peter W. Loosli (nacido en 1919), comediante formado en la Académie d’Art Dramatique (Academia de Arte Dramático) de Zúrich, y por su mujer, Trudi Loosli-Ziehlmann.

Los Loosli debutaron dicho año en Zúrich con su adaptación de El Principito que mantuvieron en el repertorio hasta el final de su carrera. Más tarde crearon espectáculos para marionetas (Pinocho, Dr. Faust, Cabaret Loosli) y para títeres de guante (La Bella de madera durmiente y Caperucita Roja, en especial). En 1969, montaron Histoire du soldat (Historia de un soldado), en colaboración con el Musikkollegium de Zúrich trabajando a la vista por primera vez, sin teatrillo. Más tarde crearon diversas obras del escritor para niños Max Bollinger (en particular Le Pont des enfants El Puente de los niños, con música de Caspar Guyer).

En 1988, los Loosli acogieron en la compañía a su hijo Tobias que había creado anteriormente un circo callejero y había trabajado como prestidigitador – ilusionista en Suiza y en el extranjero. La compañía montó una nueva versión de Pinocho (1990), con títeres construidos por Tobias.

En 1998, Muggenstutz des Haslizwerg, extraído de una obra de Susanna Schmid-German, acompañada de música de Ernst Bruni y realizada con sombras y títeres de mesa, supuso el paso de la compañía a la dirección de Tobias y de su esposa Lois Loosli-Salsbery; Peter y Trudi, se retiraron del teatro definitivamente en 1999. Desde entonces la compañía de los Loosli, aún itinerante, se dirige sobre todo al público joven. El estilo de los espectáculos ha seguido caracterizándose por la precisión de la manipulación y una dimensión narrativa importante, como en El Principito donde Peter Loosli, a la vista en el escenario, vestido de negro, más narrador que manipulador, ilustraba su texto con la interpretación del títere. Varios espectáculos de Loosli se han podido desarrollar sucesivamente bajo la forma de libros o de soportes sonoros (CD o cintas).