Teatro de títeres ruso con sede en San Petersburgo. Su fecha de nacimiento oficial es el 16 de mayo de 1931, fecha en la que se interpretó Inkubator, obra para niños (cuyo narrador es Petrouchka) sobre el papel desempeñado por los jóvenes pioneros soviéticos en la cría de pollos. La compañía comenzó como compañía amateur de propaganda. El Bolshoi teatr kukol (literalmente, Gran Teatro de Títeres) es considerada la compañía más grande de Rusia después del Gosudarstvenny akademichesky tsentralny teatr kukol imeni S.V. Obraztsova (Academia Central Estatal de Teatro de Títeres Sergei Obraztsov).

En 1932 el colectivo tenía como director artístico al actor y director Saveli Chapiro (1906-1948). Los clásicos (en particular Antón Chéjov y Romain Rolland) sustituyeron a la propaganda. Poco antes de su muerte, Chapiro realizó un sutil espectáculo poético, Skazanie o grade Lebedintse (Leyenda de la ciudad de Lebedinets, 1948).

Los años 1950 y 1960 fueron, bajo la dirección de Mikhaïl Korolev, un período próspero para el Bolchoï des Marionnettes. Su espectáculo más importante, creado con la colaboración del decorador Ivan Korotkov (1902-1985) y la diseñadora de títeres Valentina Malakhieva (1923-1997), fue V zolotom raju (En el paraíso dorado,1959), basada en la obra de Karel y Josef Čapek, La vida de los insectos. El espectáculo, que combinaba títeres, sombras y cine con actores en vivo, recibió el primer premio y la medalla de oro del Segundo Festival Internacional de Títeres de Bucarest, en 1960.

En 1964, la dirección del Bolshoi teatr kukol pasó a manos de Victor Soudarouchkine (1936-1986). Con la colaboración de los escenógrafos y decoradores Valentina y Vladimir Khovlarev, continuaron la política de innovación, en particular con V 12 chasov po nocham (Media noche cada noche, 1971), comedia musical; Pokhozhdenia bravogo soldata Shveyka (Las aventuras del buen soldado Svejk, 1973), basada en la novela de Jaroslav Hašek; Do tretiikh petukhov (Antes del tercer canto del cuco, 1976), basada en el cuento de Vassily Shukshin. Los textos poco convencionales, la puesta en escena excéntrica y el uso de varias técnicas a la vez, algunas de las cuales fueron revolucionarias en su momento, hicieron destacar estos espectáculos entre todos los del teatro soviético.

El Bolshoi teatr kukol también se distinguió por formar a jóvenes titiriteros. Valeria Kiseleva, Ilia Alperovitch, Vladimir Martyanov, Lioubov Donskova y Vladimir Korzakov eran todos virtuosos que dominaban una gran variedad de técnicas.

Bibliografía

  • Goldovsky, Boris. Kukly Entsiklopediya [Puppets. Encyclopedia]. Moscow: Vremya, 2004, pp. 75-76.
  • Leningradskomu gosudarstvennomu Bolshomu Teatru Kukol 50 let [50 Years of the State Leningrad Bolshoi Puppet Theatre]. Literary text by Anatoly Kulish. Leningrad, 1982.