Familia de titiriteros italiana, representada por dos compañías. El jefe del linaje, Gaspare Carlo Gioacchino Colla, conocido como “Giuseppe” (1801-1861),

Él era el hijo de una familia de comerciantes acomodada de Milán, que parece haber tenido en su mansión un teatro de marionetas para el entretenimiento doméstico. En 1815, a raíz de un cambio de fortuna causada por la caída de Napoleón y el consiguiente retorno de los austriacos a la ciudad, Giuseppe abandonó Milán, llevando con él el espectáculo de títeres que se convirtió de una forma de diversión en una forma de ganarse la vida. No sabemos nada sobre los altibajos de la vida de Giuseppe antes de la primera fecha definitiva para su actividad profesional como titiritero el 6 de marzo de 1835, cuando presentó un espectáculo en Borgo Vercelli.

Giuseppe Colla viajó principalmente por el Piamonte y Lombardía. Su repertorio no consistía solo en dramas apasionantes como La sepolta viva (La enterrada viva), Il parricida Innocente (El parricida Inocente), Attila flagelo Dei (Atila el Azote de Dios) o en comedias farsescas, sino que, a medida que pasaba el tiempo, lo amplió para tratar acontecimientos contemporáneas como La Battaglia di Palestro (La batalla de Palestro), que fue representado pocos meses después de los hechos en los cuales la propia empresa había estado directamente involucrada.

El principal personaje de sus espectáculos era Famiola, un payaso piamontés alegre que se remonta por lo menos a 1811, en el repertorio de la familia Rizzi. Famiola, a medio camino entre un bufón y un criado, llevaba un traje rojo con bordes blancos, una corbata verde y mostraba el carácter a todas las «máscaras» pobres. Su nombre proviene de las primeras palabras que pronunció al salir de un huevo: “ J l’ai fam ” (tengo hambre).

El repertorio, muy rico y variado, cuyo testimonio poseemos por escrito a partir de 1835, se enriqueció aún más tras la muerte de Giuseppe Colla en 1861, cuando su actividad teatral pasó a manos de sus tres hijos, Antonio, Carlo y Giovanni.

Antonio Colla tuvo un éxito notable, hasta el punto de que le reclamaron de Londres y Ciudad del Cabo. De vuelta en Italia, formó parte del Teatro Gerolamo en Milán, sede permanente hasta 1902. Allí representó la pieza de actualidad La sconfitta di Dogali (La derrota en Dogali) un centenar de veces en 1887.

Poco se sabe de la actividad de su hermano Giovanni, que es sin embargo más conocido por su hijo Giacomo (Piacenza, 1860 – Marnate, Olona, 1945) que se hizo famoso por su interpretación del personaje de Famiola. Giovanni fue el creador de la empresa actual, “Le marioneta di Gianni e Cosetta Colla”, radicada en Milán en el teatro Olivetani. Su obra se caracterizó por la creación de un nuevo repertorio que implicaba la colaboración con artistas y escritores.

La primera mención de la empresa de Carlos Colla (1833-1906) se remonta a una actuación en Broni el 22 de agosto de 1863. Carlo viajó por la zona sur del Po y por las provincias de Pavia, Emilia Romaña y, especialmente, Piamonte. El principal personaje que representó fue Famiola. Tuvo siete hijos, de los cuales sólo cuatro sobrevivieron: Rosina (1870-1957), Carlo (1873-1962), Giovanni (1877-1956) y Michele (1983/46). Se agruparon formando una empresa con el nombre de la “Compagnia Carlo Colla e Figli”. En 1890 Carlo fue sufrió una afección de garganta grave, que le obligó a abandonar el personaje de Famiola y confiarlo hijo Carlo, de apenas dieciséis años de edad.

Bajo la dirección de este último la empresa se hizo particularmente famosa por la riqueza de sus producciones y de la puesta en escena de grandes espectaculares shows musicales. La compañía todavía visitó centros menos importantes en Piamonte, como Courgné, Susa y Biella, antes de aparecer en el Teatro Regio de Parma y luego, en 1906, en el Teatro Gerolamo de Milán. A este último volvieron en el año 1910 y, de modo permanente, se establecieron allí hasta 1957, año en el que el Gerolamo se cerró definitivamente y la empresa tuvo que ser liquidada.

En 1956 la empresa “Carlo Colla e Figli” fue re-fundada, sus fuerzas motrices fueron Eugenio Monti (sobrino de Michele) y Carlo III, hijo de Giovanni. Gianni y Cosetta Colla, de la cuarta y quinta generaciones, también se establecieron permanentemente en Milán en 2005 y eran conscientes de que tenían que renovar un teatro que tiene una larga tradición. Recurrieron a nuevas técnicas y nuevos textos y aplican a sus shows los resultados de su investigación más experimental. Esta empresa se ha convertido en el mayor espectáculo de títeres italiano activo hoy en día y es famoso en el país y en el extranjero por su reinterpretación de los espectáculos tradicionales.