Fue un pintor, miembro del grupo nabí, titiritero en un teatro de títeres y escritor francés. Desde 1890, Ranson ofrecía sesiones de “guiñol” en su taller, junto a sus amigos nabíes, Sérusier, Maurice Denis, Bonnard, Vuillard y K.-X. Rouseel. Al mismo tiempo, colaboraba en el teatro artístico de Paul Fort, quien inventó el teatro simbolista. Sus experiencias abrieron camino al concepto de “artista” de títeres. Ranson y sus amigos montaron Les Sept Princesses, de Maeterlinck, en 1892, en el hotel particular de un consejero de estado, con una cortina de boca de Verkade, títeres (de un hilo) y el decorado de Maurice Denis; por otra parte, fue Vuillard quien se encargó del decorado de La Farce du pâté et de la tarte (La farsa de la pasta y la tarta, siglo XV). En 1894, Ranson interpretó libremente la obra Paphnutius, un drama religioso de la abadía Hrotswitha (siglo X), adaptado por A.-Ferdinand Hérold, ante un público entre los que se encontraban Mallarmé y Debussy. Desde entonces, también actuaron con sus títeres (de guante), con obras burlescas, escabrosas, anticlericales y antimilitares, poniendo en escena al abad Prout. Era un abad de salón, de cara roja y voz nasal. Prout se sumaba a las barbaridades de sus compañeros, el duque nacionalista Gontran de Percefort o la cocotte Clotilde de Blanc-Bedon. Se publicaron siete obras sobre el abad Prout: L’Abbé Prout. Guignol pour les vieux enfants (El abad Prout. Guiñol para niños grandes, 1902); y son estas: L’Armoire des voluptés (El armario de los voluptuosos), Le Lis de la vallée (El lirio del valle), Le Subterfuge culinaire (El subterfugio culinario), Le Presbytère (La casa parroquial), Le Mariage noble (El matrimonio noble), Sous l’œil de saint Huron (Bajo la mirada de San Hurón) y Le Sabre et le Goupillon (El sable y el hisopo). En 1903, algunas de las obras fueron representadas bajo la protección de André Fontainas, con títeres del escultor Georges Lacombes y el espectáculo lo presentaba Alfred Jarry. Así, Ranson se encontró en el núcleo de una renovación estética que integraba el arte del títere, entre el Petit Théâtre de Maurice Bouchor (El pequeño teatro de Maurice Bouchor) y Henri Signoret (1888-1892) y el Théâtre des Pantins de Jarry y Claude Terrasse (El teatro de los títeres de Jarry y Claude Terrasse, 1898).

Bibliografía

  • Jurkowski, Henryk, Écrivains et marionnettes. Quatre siècles de littérature dramatique, Charleville, Instituto internacional del títere, 1991, pp. 262-267.
  • Ranson Bitker, Brigitte, “Un nabi ‘fou de guignol’”, en Paul Élie Ranson. Du symbolisme à l’Art nouveau, catálogo de exposición, París, Somogy, 1997.