Titiritero francés. Laurent Mourguet tenía veinte años cuando la crisis de la seda le obligó a reconvertirse. Se convirtió en vendedor ambulante, recorriendo las ferias y los mercados donde intimó con un titiritero italiano que le ayudaba de vez en cuando. Se convirtió en sacamuelas, y debutó así con el Polichinelle, según la práctica heredada de Brioché, en la que este personaje realizaba un pequeño espectáculo  en la puerta de la barraca para atraer clientes. Después se convirtió exclusivamente en titiritero y actuaba en un teatrillo de tela, que construyó él mismo: cuatro barras, rodeadas de lienzos pintados, unidos entre sí y sostenidos por un travesaño, una pequeña escena se abría en uno de sus lados.

Polichinelle tenía que hablar con alguien, Laurent Morguet se asoció con Père Thomas,  violinista y cómico. De éste último se dice que era un gran amante del beaujolais (vino de una región francesa) y que se solía quedar dormido dentro del escenario. El dúo se separó y es así como nació Gnafron, personaje bebedor. Laurent Mourguet trabajó también en el Belén de la calle Noire, después en el de la calle Ferrandière (representaciones de misterio). Guignol fue creado con posterioridad, a la imagen de un pequeño y modesto tejedor lionés, aunque impertinente; también Madelon, su esposa. No sabiendo escribir, Laurent Mourguet improvisaba todas sus obras: los diálogos, se sucedían a menudo de manera intensa, multiplicando las alusiones escabrosas, los chistes, y los comentarios relacionados con la actualidad y la agitación social. En verano actuaba en los jardines (Petit Tivoli) y en las ferias; y en invierno en la planta baja de su edificio (en la calle Saint-Paul); también actuaba en cafés del puerto de Ainay. Trabajó solo en su teatrino, después con sus hijos – Étienne y Rose-Pierrette – a los que él formó en el mundo del títere, formando una sólida troupe. Se retiró en Vienne en 1840 y montó un pequeño teatro donde él trabajaba de manera artesanal con su mujer. Murió en 1844, abriendo camino a una dinastía de titiriteros que perpetuaron la existencia de Guignol.

Bibliografía

  • Fournel, Paul, Guignol, les Mourguet, Paris, Seuil, 1995.