Entre los primeros trabajos de los pioneros de la televisión en los años 20 (John Logie Baird en Inglaterra) y la extensión de redes hercianas en los años 50, los titiriteros estuvieron en la vanguardia en el uso artístico de este nuevo medio de comunicación.

Historia

A finales de los años 30, el ventrílocuo Edgar Bergen mostró sobre la pequeña pantalla su títere Charlie McCarthy y el titiritero Bil Baird habló de esta época como un tiempo muy excitante donde todas las experimentaciones estaban permitidas. Uno de los primeros artistas en trabajar para la televisión en los Estados Unidos fue Burr Tillstrom, creador de Kukla Fran and Ollie, emisión emitida en directo a partir de 1947. Hubo otros espectáculos como el Puppet Playhouse Theater, que se convirtió en el Hoody Doody y que fue presentado entre 1947 y 1960; el Life with Snarky Parker de Bil Baird; o los números del ventrílocuo Señor Wences (Wenceslao Moreno) y del ratón italiano Topo Gigio, que aparecían regularmente en el Ed Sullivan Show. A principios de los años 1950, Jim Henson aportó una contribución decisiva al títere de la televisión. Al principio, Jim Henson no quería ser titiritero, quería simplemente trabajar para este nuevo medio de comunicación. Cuando vio que una cadena local buscaba un titiritero, se puso a fabricar sus primeros títeres y fue contratado. Lo que le interesaba era la posibilidad de crear un espectáculo expresamente para este medio de comunicación en lugar de adaptar simplemente uno de sus trabajos realizados para el teatro. A partir de este momento, experimentó las técnicas existentes a su disposición. Combinando el movimiento de la cámara y las distancias focales de las lentes para crear los efectos de ilusión óptica y animar sus personajes, Jim Henson transformó profundamente el arte del títere de la televisión. Se sucedieron otras innovaciones –entre las cuales se encuentra el trabajo con materiales flexibles y ligeros para las caras de los personajes y la animación de los labios – hasta la creación del célebre Muppet Show en 1976. En Europa, los títeres hicieron también sus primeras apariciones en la televisión en los años 50. En Checoslovaquia, una de las emisiones más antiguas fue Kouzelna Klubicka (Campanas de lana mágicas); los personajes de Ju y Hele fueron creados por Stanislav Holy, y el de Bertik, por Ivo Houf; mientras que hoy en día, el títere František aparece también en la emisión Kouzelna Skolka (Jardín de infancia mágico). En Alemania, la primera emisión de televisión con títeres fue Peter und der Wolf (Pedro y el Lobo) realizada por el Augsburger Puppenkiste en 1953, mientras que en el Reino Unido, Muffin the Mule (Muffin el mulo) fue puesto en escena de 1946 a 1955 por Ann Hogarth (ver Hogarth Puppets) con las canciones de Annette Mills. En Italia, el muñeco Topo Gigio, ratón tierno y cándido, creado por María Perego en 1959, movido por cuatro marionetistas y a quien prestaban su voz conocidos actores, tuvo un gran éxito a nivel nacional e internacional. En Francia Papouf et Rapaton, obra creada por Raymond Chariaud y Martine Gervais para Tele-Luxemburgo, se encontraba entre las primeras creaciones para títeres en televisión a finales de los 50. Entre las emisiones de títeres  «históricas», además de Bonne nuit les petits (Buenas noches, niños) de Claude Laydu, con Nounours Nicolas y Pimprenelle (1962) y Le Manège enchanté (El tiovivo encantado, creado en 1963) con la pequeña Margote, su perro Pollux con acento inglés y el Zebulon de muelles, hay que mencionar Kiri le clown (Kiri el payaso) de Jean Image (1966), L’île aux enfants (La isla de los niños) y su Casimir, el gentil dragón naranja, gordo y simpático, títere habitable de Yves Brunier (1974) y, por último, la inteligente emisión Chapi, Chapo de Lonati y Bettiel sobre música de François De Roubaix (1974). Hoy en día se emite en France 5, Debout les zouzous (Arriba los zouzous) con Rolie, Polie y Olie, pequeños robots simpáticos de imágenes digitales realizados con esferas, conos y cubos. Por último, se puede también citar Téléchat, Premio a la mejor emisión francesa para la infancia y la juventud en Cannes en 1984, animado por los títeres de Harry Tolsma (diseñados por Topor), sobre ideas y textos de Roland Topor y Henri Xhonneux. Se trata de personajes estrafalarios, como Groucha el gato y Lola el avestruz, así como una multitud de personajes-accesorios surrealistas (el quejica Gluon de Trou, Pub pub, Albert el diccionario, Gisèle la cazuela, Duramou la plancha, Brossdur la escoba) que hablan y dan su opinión sobre todo y dan el tono a todo este pequeño mundo absurdo manipulado por una compañía de titiriteros belgas, los Galopines.

Los títeres de televisión

Si se quieren concebir títeres para la televisión, hay que tener en cuenta un parámetro técnico esencial de este medio de comunicación como es el primer plano. Jim Henson, para el Muppet show, lo ha comprendido bien y ha innovado. De hecho, un títere realizado para un espectáculo en sala será visto a una distancia de muchos metros: se considera que hay que tener una distancia de dos o tres veces la dimensión de la diagonal del marco de escena para englobar un espectáculo de un solo vistazo. La cara del títere puede ser inexpresiva y así suele serlo la mayoría de veces, a excepción de los títeres de bunraku, que parpadean, mueven la boca o enarcan las cejas. En cambio, un títere de televisión debe poder hacer todas las mímicas necesarias para su expresión dramática. Se puede hacer una distinción entre los títeres que se manipulan directamente ante la cámara delante de un decorado apropiado, los que están delante de la cámara pero después son recortados e incrustados en otra imagen mediante un proceso electrónico (véase Incrustación), los que no tienen existencia física porque resultan de la imaginería digital (véase Virtual títere) y, por último, los que se mueven según las técnicas de tiempos diferidos, imagen por imagen (véase Animación).

La fabricación

Para la fabricación de los títeres manipulados directamente, se puede utilizar un material rígido (madera, resinas plásticas) al cual sea posible dar las expresiones faciales con la ayuda de articulaciones y mecanismos. Los títeres pili de Taiwán actúan más en escenarios cuyo recurso dramático principal reside, sobre todo, en la acción. Hay que mencionar en este sentido al High Energy Group que preside los destinos del Taiwanese Puppet Theater. Esta importante compañía, que existe desde 1970, está dirigida por Huang Chunghwa, presidente y escenógrafo, y Huang Wencheh, «el hombre de las mil voces», director general y especialista de doblaje (véase también Huang Haidai). Los muñecos son fabricados de la forma tradicional más pura de los títeres chinos de Taiwán. La escultura sobre madera de las cabezas está resuelta por Hsu Binhuan. Los trajes están ricamente bordados y cosidos a mano. La virtuosa manipulación «de guante» es a veces completada por varillas interiores, por mecanismos con efectos especiales o por la imaginería digital. Los estudios más importantes están situados en Hu Wei en la provincia de Yun Lin. Permiten rodajes en el exterior en un vasto jardín rodeado de montañas de cemento «más reales que las naturales». Hay instalados un templo y una cascada de forma fija, listos para recibir a los títeres. En el interior, están todos los talleres técnicos – para la construcción de los títeres, el sonido y la imagen – y, sobre todo, los platós múltiples adaptados a la manipulación en elevación, que permiten giros continuados; y los decorados están instalados con antelación para varias secuencias y cuentan con una maquinaria sofisticada, trampillas de manipulación y efectos pirotécnicos. Varias cámaras ruedan simultáneamente las escenas. El High Energy Group ha invertido en el rodaje de La Légende de la Pierre sacrée (La leyenda de la piedra sagrada) más de 195 millones de euros. Con una explotación a todos los niveles (producción TV, cine, espectáculos, difusión por satélite, productos derivados, cómics, novelas, VCD, DVD, CD-audio, juegos electrónicos, secuelas en Internet, clubes de fans con 30.000 miembros) y una tasa de audiencia en la televisión que alcanzó el record del 97%, este verdadero fenómeno social ha engendrado la «moda pili» y podemos encontrar en las calles crías «modernas», vestidas como títeres.

La segunda solución para fabricar los títeres de televisión consiste en utilizar materiales ligeros. La espuma de látex con piel integrada tiene varias ventajas: puede ser trabajada, recortada, pegada, pintada, maquillada o peinada. Pero su uso es muy delicado: se necesita realizar una matriz, después un molde ahuecado para prever en el interior un espacio para la mano; y sus componentes deben ser pesados con precisión, mezclados con atención, pegados en el molde y metidos en el horno durante varias horas. Se utilizaba, y se puede todavía usar, una gomaespuma ligera – como las de poliéster y de caucho –de densidad variable y en láminas a partir de 1 milímetro de grosor o en paños, que pueden alcanzar una sección de 3 por 3 metros cuando sale de la colada. Esta gomaespuma se corta con un cuchillo eléctrico, tijeras o un cúter, y se esculpe con una lima de madera o un papel de lija. Para regularizar la superficie, se lija con un disco pulidor (papel de lija de grano grueso o medio) montado sobre una taladradora fijada sólidamente a un soporte. Para facilitar esta tarea, se puede (después de tallar la forma), empapar la gomaespuma de agua hasta su saturación. Basta con meterla a continuación en el congelador y esculpir el bloque de hielo que se obtiene usando una sierra, ralladores y limas, teniendo cuidado de usar guantes isotérmicos. Después del pulido, otro truco consiste en cubrir regularmente toda la superficie con una capa delgada de cola de neopreno que penetrará superficialmente en la espuma. Hay que dejarla secar bien para que se forme una piel que pueda después ser pintada., Es posible abrir en dos una cabeza, vaciarla para dejar espacio para la mano, y/o insertar los mecanismos de manipulación fijados con cola, y, después, volver a pegar las dos mitades. La «costura» pegada no perjudica la flexibilidad del muñeco. También hay que tener en cuenta que la espuma de poliéster tiene una duración limitada y que termina por convertirse en polvo. Dado que se le da su forma y se viste a partir del relleno, dejando en el interior un espacio para la mano, la tela debe también presentar la flexibilidad necesaria.

La manipulación

Puede hacerse en elevación alrededor de un escenario-teatrino situado en altura con sus decorados (títeres de guante pili o de mano, de tipo Muppet) o en manipulación equiplana, ya sea según la técnica del teatro negro (Les Guignols de l’info, Las noticias del guiñol, de Canal +), o con títeres habitables. La manipulación en elevación se parece a la de los marotes de mano prensil, con la diferencia de que la mano accede, directamente o a través de un teclado, a la cabeza del títere. A veces es indispensable que el personaje tenga sus dos manos prensiles y entonces es preciso un segundo manipulador que anime la otra mano, o que uno se ocupe de la cabeza y el otro de las dos manos. Se puede igualmente agregar varillas para manipular los brazos, como en el caso de la rana Gustavo (Kermit, René), en el Muppet Show. Los títeres pili también se manipulan en elevación, pero según la tradición del guante taiwanés. André Tahon animó muchas emisiones con sus marotes (Sourissimo, en un decorado de tejados invadidos de ratones; Papotin, cabeza de revista en ballets folklóricos perfectamente regulados). En la manipulación equiplana se encuentran títeres habitables como el oso Tibère, de La Maison bleue (La Casa azul). El manipulador se encierra en su traje de oso y manipula la cabeza (la mandíbula y las cejas móviles) con su mano derecha levantada por encima de la cabeza, su brazo izquierdo se mete dentro del oso, cuya pata es prensil. Para la manipulación en teatro negro, los titiriteros se visten, se encapuchan y se enguantan de negro. Sobre un fondo negro animan a los títeres dentro del rayo de luz proyectado delante. El traje de los personajes es especial porque las mangas se abren en los codos y se prolongan hacia atrás mediante puños negros que se insertan detrás del títere para manipular los antebrazos y las manos. Alain Duverne (que concibió los títeres del Bébête show en Francia, ampliamente inspirado por las emisiones de Jim Henson) usa esta técnica para la animación de los Guignols de l’info (Las noticias del guiñol). Por último, Bil Baird usó la manipulación desde arriba para su adaptación televisiva de Pedro y el Lobo con, entre otros, títeres de hilo.

En el plano comercial, las emisiones de Jim Henson fueron exportadas y entregadas sobre una amplia banda magnética de registro que incluía la pista de imagen y varias pistas de sonido traducidas a varias lenguas. Para sobreponerse a las eventuales críticas de «neo-colonización cultural» las producciones de Jim Henson recurrieron a cómicos  de los países de destino – en Francia a Micheline Dax, que prestaba su voz a Piggy –, lo que muestra, de paso, la importancia de la voz en la caracterización de un títere, aparte de su aspecto físico, sus gestos y el texto. Esta preocupación se ha manifestado en otra serie de emisiones de la misma producción, Barrio Sésamo, que ponía en escena a dos personajes estrella, Epi y Blas, uno severo y pomposo y el otro, amable, pero bobo. En Francia, como en otros países, se cambiaron varias secuencias, especialmente las que ponían en escena una gran gallina amarilla, Toccata (Big Bird, Abelardo Montoya, Caponata), títere gigante habitable, que era manipulado (y perfeccionado) por Lucien Morisse, titiritero francés.

Bibliografía

  • Baird, Bil. L’Art des marionnettes. Paris, Hachette, 1965.[S]
  • Baird, Bil. The Art of the Puppet. New York: The Macmillan Company, 1965.[S]
  • Clements, Jonathan, and Motoko Tamamuro. The Dorama Encyclopedia: A Guide to Japanese TV Drama Since 1953. Berkeley (CA): Stone Bridge Press, 2003.[S]
  • Greg (Grego) Dana para la información sobre los programas de  la televisión japonesa.
  • Kihachiro Kawamoto: Animation & Puppet Master. Tokyo: Kadokawa Shoten, 1994.
  • Sharp, Jasper. “Forgotten Roots of Japanese Animation: Masters of Puppets”. Film International. Issue 25, 2007.
  • TOPIC para la información sobre los programas de la televisión española.