Profesor de artes plásticas y titiritero alemán. Theodor Schück fundó su teatro de títeres de guante en 1912 en Friburgo-Brisgau y rápidamente lo elevó a un alto nivel artístico. Los cuentos y parodias modernas que producía se caracterizaban por una mezcla irónica de romanticismo y realismo. Se inspiraba en la sencillez provincial de su región y, en los diálogos e intrigas de sus bromas locales, lanzaba en entendimiento pretendidamente sano de sus protagonistas en las dificultades de un orden sin fundamento. Las obras que publicó con el pseudónimo de Alexander Pepusch dan prueba de la lógica confusa y del lenguaje de su modelo, el gran cómico alemán Karl Valentin.