Pintor italiano, relacionado con los movimientos posteriores a la Segunda Guerra Mundial (pintura nuclear, Cobra, pop art) y creador de los títeres para una decena de espectáculos montados con varias compañías. El trabajo de Baj, pintado, esculpido o ensamblado, propone grandes figuras llenas de elocuencia grotesca que incorporan materiales reales (pasamanería, medallas, relojes antiguos, esquirlas de espejo, etc.). Una de sus obras clave, Il funeral di de l’anarchico Giuseppe Pinelli (Los funerales del anarquista Giuseppe Pinelli, 1972), que denuncia la “caída” mortal por la ventana de la comisaría de Milán de un militante anarquista, fue utilizada en 1978 por el Marionetteatern de Estocolmo bajo la dirección de Michael Meschke para crear L’Affaire Pinelli, con figuras planas hechas a partir de madera. En 1980, el director italiano Massimo Monaco le pidió dibujos a Baj, a partir de los cuales creó los títeres y la escenografía para Pinocchio. El propio Monaco retomó otras grandes figuras cortadas en contrachapado para Amleto il lunatico, de Guido Almansi, en 1987. El mismo tipo de colaboración unió después a Baj al Teatro Gioco Vita, primero para El pájaro de fuego, de Stravinski (1994) y después para Orfeo y Eurídice (1998).

Baj se convirtió en constructor de títeres, o al menos en escultor de personajes más o menos articulados, para Massimo Schuster y el Théâtre de l’Arc-en-Terre; de ese modo se crearon cinco espectáculos. Ubu roi (1984), con sus esculturas en Meccano®, marcó el inicio de una colaboración que duró hasta la muerte del artista; el espectáculo se presentó en la Bienal de Venecia e hizo giras por treinta y cinco países de Europa, África y Asia durante doce años. Le siguieron, con esculturas-combinaciones de madera, Iliade (La Ilíada, 1988); Le Bleu-blanc-rouge et le Noir (El Azul-Blanco-Rojo y el Negro, 1989), una ópera de Lorenzo Ferrero sobre un libreto de Anthony Burgess co-producido por La Scala de Milán; Roncevaux ! (¡Roncesvalles!) (2001) y Mahabharata (2003). Massimo Schuster también sacó una serie de imágenes de varios grabados de Baj para uno de los  capítulos de Charta (1993, teatro de papel), espectáculo creado en Sarajevo, que en ese momento estaba asediada.

La participación de un artista de la importancia de Baj en los espectáculos de títeres, siguiendo los pasos de predecesores como Bonnard, Schlemmer, Depero o Miró, ha ayudado a desarrollar el interés de muchos titiriteros hacia este tipo de colaboración artística, abriendo las puertas a otros cruces entre las artes visuales y el teatro de títeres.