Titiritera rusa. Entre 1943 y 1946, Marta Tsifrinovitch tomó clases de dirección y de escenografía en el Teatro Central de Sergueï Obraztsov. Influenciada por los espectáculos solistas de este último, empezó a producir para los escenarios de varietés con ¿Qué se parece a qué?, Como los humanos, así los títeres, entre otros. Uno de sus personajes favoritos era la inagotable Venera Poustomelskaïa (aprox. “Venus del Verbovacío”), títere realizado por Iekaterina Beklechova (1897-1977). Tenía unas proporciones armoniosas, llevaba un enorme collar y gafas, y hablaba constantemente sobre “los problemas generales de la existencia humana”. Venera fue muy popular. Marta Tsifrinovitch dio giras por la Unión soviética y el extranjero. Entre los años 1960 y 1980, pasó por la televisión en programas tan famosos como el Muppet Show de Jim Henson en Estados Unidos. En el calendario del año 1989 de la Unima, Venera Poustomelskaïa apareció al lado de las criaturas de Philippe Genty, de Albrecht Roser y de Josef Skupa entre otros.

Marta Tsifrinovitch empezó como directora en 1984 con El Fuego de la esperanza, comedia musical poética sobre cuadros de Picasso. El Teatro Ognivo en Mystichtchi, en las afueras de Moscú, retomó el espectáculo en 1995. Con este teatro M. Tsifrinovitch continuó sus investigaciones sobre una forma escénica pictórica y plástica, creó Mañana empieza ayer (2002), fresco que relata la historia rusa del siglo XX a través de la pintura de varios artistas. A las técnicas tradicionales del teatro de títeres añadía elementos nuevos como música electrónica, instalaciones y grafismo digital. El espectáculo se presentó en el festival internacional de la Unima en 2004 en Croacia.

Marta Tsifrinovitch recibió numerosos premios nacionales e internacionales. Publicó sus memorias, U koukol vsyo kak ou loudeï (Como los humanos, así los títeres), en Moscú en 2003.